Mientras se preparaba el almuerzo, la comunidad participó de un juego comunitario, del cual también participaron nuestro arzobispo Daniel junto al seminarista Fermín, actitud que fue por demás agradecida y celebrada por nuestra comunidad.
El juego consistía en una competencia entre cuatro equipos, que ganaban puntos si cumplían cuatro pruebas, que eran calificadas por un jurado, integrado por el Cardenal Daniel, el seminarista Fermín, y Cristina, catequista de nuestra comunidad.
Fue un momento muy ameno, y que sirvió para divertirnos y estrechar lazos.
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