Fuimos invitados por tercer año a vivir esta Navidad con Jesús, y una de las propuestas era realizar una obra de misericordia.
Nuestra comunidad resolvió realizar una colecta para tener una atención con los vecinos del Barrio Plácido Ellauri, donde el P. Cacho inició su labor.
A pesar de las dificultades económicas que se perciben, la comunidad fue muy generosa, y se llegó a una colecta de $ 4.040, con los que compramos 100 turrones, y 36 budines, que unimos a otros 50 que una persona que nos donó.
En la mañana del 24, como en la de hoy, junto a Angélica Ferreira y Mercedes Clara recorrimos el barrio para entregar este regalito, junto a un folleto que, en forma de cuento, mostraba el trabajo realizado en el barrio este año, con la consigna de invitar a los vecinos a renovar la esperanza de que es posible mejorar el barrio si nos unimos.
Una vez más fue hermoso constatar cómo la memoria del P. Cacho sigue viva en los vecinos, y aún más: cómo los vecinos a partir de lo trabajado este año se permiten soñar con más proyectos para reconstruir la comunidad.
Damos gracias a Dios por constatar su presencia en los vecinos, y a nuestra comunidad por la generosidad que nos permitió llegar a cerca de noventa familias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario